Sagrada familia con san Juan y santa Catalina, Caravaggio

Sagrada familia con san Juan y santa Catalina. Pinacoteca Bolonia, 1593. sintetiza todo el ideario plástico de la imagen religiosa, el ideario plástico es el de una composición clara, que se muestra frontalmente, presidida por la figura de la Virgen con el Niño, enmarcadas en una estructura arquitectónica. San Juan y Santa Catalina se colocan simétricamente creando un triangulo. Colores luminosos y nítidos, con un sombreado suave. Composición luminosa. Figuras monumentales que a través del dibujo y de los sombreados se crean formas hercúleas, amplias, muy abiertas. A partir de este esquema se pueden producir ligeras variaciones buscando la composición en diagonal.

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El grito, Munch

El grito. Imagen muy expresiva donde aparece un elemento peculiar expresionista: la sinestesia. La barandilla hace alusión a la pérdida de orientación, a la huida. Este cuadro, como exponente de la corriente expresionista nórdica a la que Munch pertenecía, expresa las emociones y sentimientos de su autor.
Situados, físicamente, frente al cuadro, el sonido es inaudible, el desamparo parece incomprensible. Para reforzar el silencio angustioso del grito, vemos a dos paseantes que no se conmueven ante ese desamparo. Resulta difícil resistirse a la influencia de la locura que intenta transmitir el hombre que está situado en primer plano con la boca abierta y con las manos tapándose los oídos para no escuchar su propio e incontenible grito que es, también, el grito de la naturaleza. El "gritador" está reducido a una mísera apariencia ondulante en un paisaje de delirio.
El grito es un grito sobre el sentido de la existencia. Ante la angustia existencial hay dos soluciones. Olvidar las preguntas que no tienen respuesta, y huir. Es la postura adoptada por los dos paseantes que siguen las líneas rectas hacia la inexistencia del punto de huida. O bien dudar de la propia existencia. Esta última es la que adopta el "gritador". Su cuerpo, sus manos, su cabeza, su boca, su grito se diluyen en las líneas curvas del océano y el cielo fusionándose. El ambiente, las leyes, las reglas de la sociedad, simbolizadas por la balaustrada derecha, no pueden detener esta disolución.
Paradójicamente, dudando de su propia existencia, el "gritador" se esfuerza en demostrar su alteración. Aunque sus trazos se diluyen, se distingue perfectamente su cara. Este no es el caso de los dos paseantes que no son más que dos sombras oscuras. Eligiendo las certezas simbolizadas por las líneas rectas, su existencia desaparece en el olvido. El "gritador" es el elemento notable del cuadro.
Habría que dilucidar si Munch trataba de expresar su propia angustia personal o la desesperación del hombre (en abstracto), frente a un mundo convulsionado por la revolución económica e industrial, la pobreza de las clases trabajadoras y la injusticia social.

Fachada Coronería Burgos

La portada de la Coronería se situa en la parte norte del transepto. En algunos documentos aparece como de la “corronería”, “cornería”, o “conornería” que parece ser que proviene del apellido de “Gutierre el Correonero”, que hacia 1257 poseía unas propiedades próximas a esta puerta. También se la denomina de los Apóstoles por las figuras que aparecen representadas junto a la embocadura de la puerta.

En general sigue el esquema de la puerta del Sarmental, de la cual hablaremos más adelante, pero introduce como novedad la prolongación de las jambas por los muros laterales, donde se sitúan las esculturas del apostolado.

La decoración de la parte inferior debió de realizarse hacia 1250, corriendo a cargo probablemente del mismo equipo de artistas que trabajó en la puerta del Juicio Final de la catedral de León.

El vano de la entrada fue modificado a fines del siglo XVI o comienzos del XVII, colocándose en ese momento una entrada de estilo manierista.

En el desaparecido parteluz estaría la escultura de Dios Padre, repitiéndose el modelo de la catedral de Chartres. A su vez este mismo esquema lo repite León, pero sustituyendo la representación de Dios Padre por la de la Virgen María.

Ya ubicándonos en el tímpano la imagen se articula en torno a un Cristo en majestad que no alcanza la belleza del representado en el Sarmental. A su lado aparecen la Virgen con rasgos muy delicados y San Juan Evangelista, en actitud de intercesión, mientras que varios ángeles, colocados a los lados y en la parte superior, portan los diferentes símbolos pasionarios.

Se repite el esquema de la portada de Chartres, pero aparecen diferencias en cuanto a la colocación de los personajes y en cuanto a las calidades técnicas de ejecución.

En el dintel se muestra, reproduciendo de nuevo el esquema de Chartres, el momento en que San Miguel pesa las almas de los bienaventurados, reyes, obispos, personajes nobles, y a través de un pequeño templete, que representa la puerta del paraíso, acceden a él. Aparecen una reina, un rey, un obispo y dos monjes.

En la otra parte aparecen unos demonios que arrastran violentamente a los condenados.

En las arquivoltas se ven escenas de la Resurrección de los muertos junto a serafines y ángeles.

El espacio central de la fachada lo ocupa un gran ventanal tripartito que ilumina el interior del crucero. En el ultimo cuerpo podemos ver un vano triple decorado con tracerías, donde se encuentran figuras de Reyes que, al igual que los que existen en la fachada principal y en las torres, datan de finales del siglo XIII.

Los especialistas se decantan por interpretarlo como un programa laico de exaltación de la monarquía, modelo que imitaría al de la catedral de Reims.

Dos días de Ausencia

Siento haberos avandonado! he estado ausente dos días, asique os pongo las 3 obras seguidas.
espero que os guste

El columpio, Fragonard. 1767

El Columpio. Jean-Honore Fragonard (1732-1806). Wallace Collection. 1767 Fue encargada por el barón de Saint-Julien. Es un tema que representa a la amante del barón, subida a un columpio que es empujado por un marido complaciente que aparece en sombra, mientras que un joven galán, el barón, tumbado bajo una estatua de Cupido, pero que aparece con mucha luminosidad, contempla las piernas de la joven.
El cuadro expresa la sumisión del admirador y la belleza de la adorada. Recoge el espíritu sensual del Rococó pero sin el interés psicológico de Watteau o la languidez de Boucher. Es una escena explícitamente vital y erótica. A ello contribuye el marco en el que se desarrolla, una vegetación lujuriosa, la estatua de Cupido, el joven tumbado que mira las piernas, e incluso el zapato se desprende de forma sensual.
La intención aparece velada. Parece algo fortuito, pero no lo es. El joven galán parece haber tropezado y caído. La vista del vestido parece casual, pero nada es casual en este cuadro. Se trata de un juego entre voyerismo y exhibicionismo. La faz del joven tumbado parece iluminada como si hubiera visto una aparición, y la mujer aparece con ojos cristalinos. Parece que se ha captado un momento exacto. Es un instante voluptuoso y frágil.

Bienvenid@s!

Os doy la bienvenida a todos (si es que hay alguien leyendome).

Lo primero explicaros un poco quien soy. Soy una futura licenciada en Historia del Arte, estoy en cuarto, asique creo que mis conocimientos son los suficientes para poder llevar a cabo este trabajo que ahora os cuento.

Os explico un poco el motivo que tengo para crear este blog y para orientaros un poco.
Con este blog lo que quiero conseguir es dar a conocer algunas de las más bellas obras de arte, unas muy conocidas y otras no tanto.

Como dice el título del Blog, cada día iré colgando la imagen y la explicación de una obra de arte. Primero lo haré según mis preferencias, y después, si consigo que me lea alguien, pues puedo ir comentando alguna obra que me sugirais.

Espero que os guste el trabajo que voy a comenzar, y que me comenteis lo que querais.

Un saludo.